Los padres no son profesionales (ni deben serlo)

Los padres no son profesionales (ni deben serlo)

Los padres de niños con una alteración del habla o del lenguaje o discapacidad, no se deben angustiar con la idea de que el niño tenga más necesidades.
Es absolutamente cierto, y además es fundamental informar a los padres para que sepan cómo sacar partido de las situaciones cotidianas.
Pero, al mismo tiempo, los padres tienen a veces grandes dificultades para realizar cosas que a los profesionales les resultan obvias tanto por oficio como por experiencia.
Los padres tienen un papel fundamental, que es el de ser padres. El modo en el que interactúan con sus hijos, el cariño y la afectividad que perciben de ellos sus hijos, y todos los momentos cotidianos que comparten, son la más valiosa fuente de estimulación y de aprendizaje, para todos los niños.

El trabajo del profesional con respecto a los padres debe consistir en:

- Dar pautas de comportamiento
- Proporcionarles la adecuada y necesaria formación para que sepan lo que le ocurre a su hijo y cómo ayudarle
- Informarles de lo que se hace con el niño y el porqué
- Ayudarles y orientarles en todo lo que soliciten.